Existen gran cantidad de métodos anticonceptivos y opciones para todas las necesidades hoy en día. Elegir la que mejor se acomoda a cada uno depende del estilo de vida que se lleve, el tiempo que se desee invertir en este, y, algunas veces, si es que se tiene una relación estable o no. Algunas cuestiones como el historial familiar y el propio historial médico también influyen en la toma de esta decisión. Aunque los anticonceptivos de cualquier tipo son muy efectivos, muchos de ellos dependen de cómo se usen. Eso quiere decir que, una vez que se decide cuál utilizar, uno debe comprometerse a utilizarlo como para que funcione correctamente.
En general, no existe ningún límite de edad para los anticonceptivos, ya que podría utilizarse por muchas otras razones, además de evitar un embarazo no deseado. Algunos métodos podrían ser prescriptos para ayudar a tratar condiciones como la anemia, fibromas, amenorrea, acné, períodos irregulares, dismenorrea, endometriosis, prevención de cáncer de endometrio y ovario, y, para algunas mujeres, síndrome premenstrual.
La mayoría de los métodos anticonceptivos son reversibles, con la excepción de aquellos de solución permanente (quirúrgicos). Y uno puede elegir que tan rápido desea revertir los efectos consultando con un profesional de la salud. Por ejemplo, con la píldora, es cuestión de interrumpir la toma en cuanto se desee.
Al existir tanta desinformación acerca de los métodos anticonceptivos, es necesario que se consideren todas las opciones disponibles y entender cómo funcionan, para elegir la apropiada para cada uno de nosotros.
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