Hemos visto en varias ocasiones qué cosas pueden regalarse a una mujer en un día especial. Y así como es importante darse una idea de qué cosas pueden hacerla feliz, también es esencial saber con qué no debemos presentarnos en su casa, con una tremenda sonrisa pero corriendo el riesgo de recibir una sonrisa falsa y un “eeeh… gracias” en el mejor de los casos. No metas nunca la pata regalando una de estas cosas a una mujer:
1. Una aspiradora: Lo último que quiere hacer una mujer en San Valentín, su cumpleaños, Navidad o el día de la madre es acordarse que hay que limpiar la casa. Puede que tú pienses que estás siendo considerado porque el año pasado te dijo que necesitaba una lustradora nueva, pero nunca te dijo que lo quería como regalo para un día en que la festejes. Nada de electrodomésticos. Recuerda que hacer las labores domésticas no es una muestra de amor. Mejor regálale una sesión de masajes o de arreglo personal en un spa.
2. Ropa: Es un ámbito muy, muy difícil. Sí, a las mujeres les encanta la ropa; el problema es que es una situación bastante complicada. Si le compras algo que le queda muy grande, creerá que tú piensas que está gorda. Si le queda chica, ella será la que piense que está gorda. Es poco probable que atines la talla exacta, a menos que hayas estado con ella cuando se probó algo que le quedaba muy bien pero que no pudo comprarse por algún motivo y recuerdes bien la marca y la talla. Una buena alternativa es regalarle una suscripción a una buena revista de modas.
3. Una cubierta para el volante del auto: Puede que a ella le guste su auto, pero no querrá en un día especial como regalo accesorios para él. No es un hombre. Nada de cubiertas para asientos, pisos alfombrados ni equipos de sonido. No es romántico para ellas. Si de verdad le gusta su auto, cómprale algún accesorio un día cualquiera, como una sorpresa, no para su cumpleaños ni San Valentín. Lo único que podrías considerar, si vives en un país con clima muy frío en invierno, es unos guantes de cuero forrados por dentro para que sus manos estén tibias y con estilo mientras conduce.
4. Un libro de autoayuda: Regalar un libro puede sonar como algo que no tiene pierde. Generalmente dice mucho de quien lo regala pues es comprado pensando en quien lo va a recibir. Y ese es justamente el problema. Puede que ella de verdad necesite el “100 maneras de controlar tu ira” e incluso que haya mencionado que quiere comprarlo, pero no será nada agradable desenvolverlo en una ocasión especial. A nadie le gusta que le recuerden su neurosis. Si lo haces, probablemente regreses a la librería la semana siguiente para buscar el “Cómo sobrevivir a una ruptura”. Si quieres regalar un libro, hazlo sobre un tema que a ella le apasione.
5. Una tarjeta de regalo: Estas son las famosas gift cards de las tiendas por departamento o de las tiendas especializadas. A menos que sirvan para algo específico como una manicura o un masaje, las tarjetas de regalo son los regalos menos especiales que le puedes dar a alguien. No requiere de ningún esfuerzo mental regalar una tarjeta de plástico equivalente a dinero en efectivo para comprar algo en una tienda. Si tu hermana te la pide, no hay problema. Pero tu novia o esposa jamás querrá una de regalo en un día especial.
6. Un oso de peluche: ¿Los peluches son bonitos, verdad? Sí, claro. Cuando tienes 13 años. Las mujeres más crecidas no necesitan ni quieren peluches en días especiales. Si a alguna sí le gusta, lo más probable es que tenga una amplia colección en su casa (iniciada, nuevamente, en la niñez). ¿Quieres saber el secreto? compra a tu esposa o novia un regalo que la haga sentir como la mujer que quiere ser, no la niña que alguna vez fue. Una buena alternativa al peluche es una carta o una poesía que te salga del corazón.
7. Entradas para un evento al que tú quieres ir:
- ¡Amor, tu regalo!
- ¡¿Qué es, qué es, amor?!
- ¡Dos entradas para ver la final del campeonato de Vale Todo!
No vas a poder ir porque vas a terminar con el cuello torcido por una llave de tu novia. Sólo digamos que no es la mejor manera de decir “te quiero”. Si va a comprarle entradas, asegúrate que sea algo que ella de verdad quiere ver: una entrada para el concierto de su grupo favorito local o de un espectáculo de danza son buenas opciones. Y ve con ella, así no te guste. Ganarás puntos.
8. Joyería barata: Sí, a todas las mujeres les gusta la joyería. Pero nadie habló de la joyería barata, que luce de mala calidad y se pone verde cuando ella suda o se baña. Si regalas joyería barata, sólo dices una cosa de ti: también eres barato, y en todas las áreas de tu vida. Ella pensará que eres un tacaño y valoras tu dinero más que a ella. La regla con regalar joyería es una sola: regala la de verdad o no regales nada. Si ella quiere joyería barata, se la comprará ella misma.
9. Una balanza para el baño: Si ella tiene algunos rollitos y necesita perder peso, e incluso si lo ha dicho, no significa que tienes carta abierta para regalarle algo así. Ni tampoco la membresía para un gimnasio o sesiones con un entrenador personal. Regalar cualquier cosa relacionada a ponerse en forma es una vía directa al conflicto, porque ella recibirá el mensaje de “necesitas bajar de peso”. Y quien necesitará el regalo eres tú, porque vas a necesitar cargar tus cosas cuando te bote.
10. Chocolates y flores: ¿Controvertido, no? es la combinación que durante años ha hecho derretirse millares de corazones. Pero no estoy diciendo que nunca haya que regalarla. Sé original. A las mujeres les encanta la originalidad y les fascina que un hombre rompa los esquemas. Los chocolates suben de peso y las flores se marchitan. Sé inteligente y regálale algo especial y significativo. Evita lo obvio, lo que sus anteriores novios pudieron haberle regalado, las 10 cosas de esta lista y serás el mejor novio / esposo para ella. Piensa, por ejemplo, en su hobby o pasatiempo preferido y encuentra el accesorio o ayuda más original para que pueda usarlo.
